El VPH es la infección de transmisión sexual más común tanto en mujeres como en hombres. Se trata de una infección viral que se puede transmitir de una persona a otra mediante las relaciones sexuales anales, vaginales u orales, o mediante otro tipo de contacto cercano con la piel durante actividades sexuales. Casi todas las personas sexualmente activas se infectan por este virus en algún momento de su vida.
El VPH puede transmitirse incluso cuando la persona infectada no presenta signos ni síntomas visibles.
La mayoría de las veces las infecciones por el VPH desaparecen completamente sin causar ningún problema de salud. Sin embargo, si una infección no desaparece por sí sola, es posible que se presenten síntomas del VPH meses o años después de haberse infectado.
Generalmente, las verrugas genitales aparecen como pequeños bultos o grupos de bultos en la zona genital alrededor del pene o del ano. Estas verrugas pueden ser pequeñas o grandes, abultadas o planas, o con forma de coliflor.
La infección por el VPH no es cáncer, pero puede causar cambios en el cuerpo que produzcan cáncer si la infección corresponde a los de alto riesgo oncogénico.
En general, se cree que el VPH es la causa de cerca del 90 % de los cánceres de ano y cuello uterino, de cerca del 70 % de los cánceres de vagina y vulva y 60 % de los cánceres de pene. Estudios recientes muestran que cerca del 60 % al 70 % de los cánceres orofaríngeos pueden estar vinculados al VPH.
El cáncer se desarrolla muy lentamente y puede que no se diagnostique hasta años, o incluso décadas, después de que una persona se infecte con el VPH.
No existe un tratamiento específico para el VPH, pero hay tratamientos para los problemas de salud que causa.
Hay dos medidas que ayudan a reducir el riesgo de contraer o contagiar el VPH y las enfermedades relacionadas con este virus:
A la vez, contribuye con la equidad de género, ya que tanto las mujeres como los varones son responsables de la transmisión del virus y se verán beneficiados con la vacunación.
En la Argentina, además se recomienda como estrategia adicional la vacunación contra VPH para mujeres y varones entre 11 y 26 años que vivan con VIH y trasplantados. con esquema de 3 dosis (0, 2 y 6 meses).
Consultá a tu médico si aparecen lesiones como verrugas, crecimientos, bultos o llagas en el pene, el escroto, el ano, la boca o la garganta.
Si vos o tu pareja tienen verrugas genitales, deberían evitar las relaciones sexuales hasta que las verrugas hayan desaparecido o se las hayan extirpado. Sin embargo, no se sabe por cuánto tiempo una persona puede transmitir el VPH después de que hayan desaparecido las verrugas.
Una persona puede tener el VPH durante muchos años antes de que le cause problemas de salud. Por lo que no hay manera de saber por cuánto tiempo se ha tenido el virus, si tu pareja te lo transmitió o si fuiste vos quien se lo pasó a tu pareja.
El VPH no necesariamente es un signo de que vos o tu pareja estén teniendo relaciones sexuales con otras personas. Es importante que las parejas sexuales hablen de su salud sexual y de los riesgos de todas las infecciones de transmisión sexual.
Fuentes: