Carina siente incertidumbre por los cuidados de su madre

"Estimada Dra:
Tengo 25 años y hace 11 años operaron a mi madre de un meningioma en la base del cráneo. La operación fue un éxito, pero hace dos años le encontraron un nuevo meningioma. Unos meses después de la noticia, todo se tranquilizó en casa, mis padres, mi hermano y yo continuamos con nuestros trabajos y estudios, porque luego de la última Resonancia, se decidió no operar a menos que el tumor crezca. Mi madre debe realizarse un control anual, que consiste en un campo visual y la visita a la neurocirujana. Cuando llega ese momento, el humor de toda la familia cambia. Hace poco, mi hermano menor decidió que se va a vivir solo. Yo me alegro, pero pienso qué pasa si yo me tengo que quedar a cuidar a mis padres. ¿Qué pasa si tienen que operar de nuevo a mi madre?
Carina, de Neuquén
"

 

Estimada Carina:

Contestando directamente a tu pregunta te digo que no se puede saber qué hacer ante algo que no está sucediendo.

Si en algún momento tienen que operar a tu madre, ahí tendrás que evaluar, tanto vos como tu familia qué hacer y cuál es la mejor forma de ayudar.

Entiendo que es difícil vivir con incertidumbre, que además se incrementa cuando llega el momento del control. La forma de reducir ese estado es el que Uds. establecieron con éxito: seguir con la rutina de trabajo, los estudios y los proyectos de todos los integrantes de la familia.

Es imprescindible mantener esta estrategia, porque existe la posibilidad de que tu mamá viva con ese meningioma toda la vida, ya que no se optó por la cirugía en esta ocasión.

La forma de controlar la situación es seguir con el plan de vida de cada uno. Esperar a ver qué pasa con la enfermedad (si es que hay algún cambio) sería permitir que ésta les imponga la agenda a seguir. Eso paraliza, angustia, desorganiza y descontrola.

La decisión de tu hermano de independizarse, puso el tema del ciclo de vida de la familia sobre la mesa. Si él se va, este cambio marca el fin de la familia tal cual funcionó hasta ahora. Pero el hecho de que se vaya, no cambia nada respecto a la enfermedad de tu madre. El problema en el campo visual no parece afectarla ni en su trabajo ni en su independencia. Es lógico que los preocupe, pero no les impone tareas de cuidado, por lo que vivir en casa de tus padres o en otro lado no impacta en la enfermedad. Nada indica que tus padres necesiten ser cuidados.

La preocupación y los cambios de humor cada vez que se tiene que hacer los estudios médicos son inevitables, porque los controles evidencian que la enfermedad existe, aumenta la incertidumbre y la sensación displacentera ante un evento que no se puede controlar. Por eso es tan importante controlar las emociones que la acompañan e incrementar el sentimiento de autoeficacia, planificando la vida al margen de la enfermedad. Sería bueno que piensen en alguna estrategia de gratificación en esos días de incertidumbre.

Por lo demás, vos y tu hermano están al tanto de la situación, y podés conversar con tu familia acerca de la necesidad de estar informada no importa donde vivas. De esta forma tu madre sabe que si necesita algo ustedes van a estar ahí para acompañar y para ayudar.

La única forma de hacer frente a esta situación es la que están haciendo hasta ahora, continuar con los proyectos propios y los familiares. Cualquier inquietud, no dudes en volver a consultar.

Dra. Vera Bail