Sabemos que el hábito de fumar es perjudicial para la salud y que el sólo hecho de fumar un cigarrillo incrementa el riesgo de sufrir muchas enfermedades, sin embargo, sin aún necesitas más motivos para dejar de fumar, te mostramos sus efectos estéticos, que quizá también resulten en una fuerte razón para abandonar el tabaco.

• Menos arrugas en la piel: el mayor nivel de radicales libres del oxígeno sumado a la vasoconstricción que produce el tabaco entorpece la llegada de nutrientes a la piel. Ello produce un envejecimiento prematuro de la misma con mayor incidencia de arrugas. Cuando dejamos de lado la nicotina, la sangre transporta más oxígeno a todo el organismo, incluida la piel. Como consecuencia, ésta recobra su suavidad y luminosidad.
• Piel saludable y rejuvenecida: el tabaquismo reduce los niveles de colágeno y elastina así como también reduce los niveles de vitamina A en el organismo, todo lo cual afecta negativamente a la piel y estropea su apariencia al limitar su brillo y modificar la tonalidad. Dejar de fumar permite una mejor oxigenación y más luminosidad en la piel.
• Correcta coloración de las uñas de las manos: los dedos que sujetan el cigarrillo suelen obtener una coloración parduzca y amarillenta que se denomina “uña arlequín” y se produce por efecto del humo sobre los tejidos cercanos. Al tiempo de abandonar el hábito de fumar, esa coloración desaparece.
• Pelo más fuerte y sano: por la misma razón que la piel se seca y envejece, el cabello recibe menos nutrientes y se oxigena menos, por lo tanto, se seca con facilidad, se debilita su crecimiento y se vuelve más frágil y quebradizo. Al dejar atrás el tabaco, el pelo recupera su brillo y suavidad, mostrando un aspecto mucho más saludable y nutrido.
• Más firmeza en la piel: la piel se vuelve más fina al reducirse el grosor de la dermis y de la epidermis, por lo tanto, se vuelve más delicada, menos fuerte y más propensa a sufrir flaccidez. Cuando dejamos de fumar, reducimos ese riego.
• Dientes más blancos:  es muy frecuente en fumadores ver manchas marrones debido al paso del humo del tabaco por la boca, en los dientes, lo cual sin duda afecta la estética además de la salud bucal del fumador. Cuando se deja de fumar, los dientes recuperan su color blanco natural y el mal aliento desaparece

Estos efectos estéticos de fumar se suman a una larga lista de efectos negativos sobre la salud del organismo, por lo tanto, tienes un gran conjunto de motivos para dejar de fumar y quizá analizando la belleza, además de la salud, puedes encontrar una fuerte motivación para abandonar el tabaco y dejarlo fuera de tu vida.