Parkinson

Los mitos del cuidado

Cuidar y atender a una persona con la enfermedad de Parkinson puede llegar a ser una tarea ardua y muy exigente, tanto física como psicológicamente.
Cuando nos enfrentamos a una enfermedad crónica y degenerativa es inevitable sufrir, y necesitamos poner en marcha todos nuestros recursos personales y aprender otros.  
Principalmente tendremos que aprender a desterrar algunas creencias que nos dificultarán la vida a los cuidadores y a los enfermos.

“Solo yo y nadie más que yo”

Es un pensamiento bastante habitual en los cuidadores, por el cual no buscan ayuda para el cuidado del ser querido.
Asumir todas las tareas, pensando que “solo yo sé lo que necesita” y además “es mi obligación cuidarle”, se torna en una situación difícil de sostener y nos lleva poco a poco a una dependencia del enfermo, difícil de manejar.
De todos los apoyos importantes y necesarios, el apoyo emocional es el que deberían brindar, en exclusiva, las personas que sienten afecto por la persona enferma.

“Primero el enfermo por encima de todo”

Si el cuidador posterga sus  necesidades, está descuidando su propia salud física y emocional, para poder mantener la salud de otra persona. A la larga, difícilmente podrá cuidar adecuadamente de la persona enferma.
Hay que reestructurar la vida cotidiana, pero eso no significa abandonarlo todo.
Esta enfermedad es muy larga, por lo cual es fundamental incorporar los cuidados a uno mismo en todo el proceso de atención al enfermo.

“No puedo cometer errores”          

Cuántas veces los cuidadores, no aceptan ayuda porque nadie lo va a hacer mejor que ellos mismos?
Tanto el cuidador como en enfermo se tienen que adaptar y acostumbrar a la incertidumbre que produce esta enfermedad y a que, cometer errores, forma parte de la vida en general y del cuidado cotidiano de un enfermo de párkinson.
En la tarea de cuidar se cometen errores (es imposible no cometerlos), pero hay que intentar aprender de ellos.
 
Cuidar con amor y generosidad, pero sin maltratarse a uno mismo, y sin dejar de cuidarse con mucho mimo, nos ayudará a transitar este camino de la mejor manera posible.

NO TENEMOS QUE VIVIR LOS CUIDADOS SOLOS
PIDAMOS AYUDA

Fuente: Asociación de Parkinson Madrid

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