Una parte considerable de la educación sexual integral de los niños/as de nivel preescolar, refiere a las pautas de cuidado del cuerpo y autoprotección, así como el concepto de intimidad y el cuidado de la misma para poder decir que “no” frente a interacciones inadecuadas con otras personas, y no guardar secretos que los hagan sentir mal, incómodos o confundidos. Estos conceptos son algunos de los que integran la currícula escolar de la educación sexual integral, adaptados según las edades de los alumnos. No obstante, la acción o formación familiar es crucial en este aspecto.
Queremos que nuestros hijos/as desarrollen vidas plenas y saludables. Para ello, es importante enseñarles a prevenir las agresiones sexuales, aún cuando muchos de nosotros encontramos difícil hablar sobre estas cuestiones, especialmente con niños tan pequeños.
Es fundamental generar un clima de confianza y de libertad que los anime a preguntar sobre aquello que les inquieta. Es conveniente conversar con ellos sobre aquellas partes del cuerpo consideradas privadas o íntimas, enseñándoles a nombrarlas correctamente. Esto les ayudará a adquirir un lenguaje apropiado para conocer mejor su cuerpo, y a expresarse con mayor precisión cuando deseen preguntarnos o contarnos alguna situación que los perturba.
Es muy importante conversar con los niños/as sobre los vínculos familiares y los derechos de ser respetados por todos los miembros de la familia en el cuidado de su privacidad e intimidad, especialmente en los momentos de la higiene, de cambio de vestimenta y de sueño.
Explicarles que, en ninguna circunstancia, un adulto o un niño/a mayor tiene derecho a lastimarlos, hacerles daño o tocarlos de forma que los haga sentir incómodos, y si eso sucede, ellos tienen derecho a defenderse, procurando apartarse de quienes les provocan incomodidad o daño y contando esa situación.
Es importante que los niños/as sepan que es correcto “decir no”, inclusive a un pariente cercano, familiares y amigos de la familia. No tienen que obedecer en todo lo que se les solicita por el solo hecho de que sea un adulto o familiar. Así como es frecuente pedirles que se cuiden de hablar con extraños, también es importante protegerlos de adultos conocidos, si los niños/as manifiestan temor o inseguridad.
Las estadísticas sobre abuso sexual infantil en la Argentina, elaboradas sobre la base de los llamados recibidos en el 0800-222-1717 del Programa “Las víctimas contra las violencias” entre el 19 de noviembre y el 19 de diciembre de 2016, indican que el 75% de los abusos infantiles son perpetrados por familiares.
Otro tema esencial, son los secretos. Generalmente, a edades tempranas, los niños comienzan a comprender las conductas de guardar secretos. El valor de la confidencialidad es una enseñanza que debe ser alentada, siempre que se trate de secretos para guardar, como un cumpleaños sorpresa o un regalo. Hay que enseñarles a distinguir sobre los pedidos o amenazas que puedan realizarles algunos adultos, de no contar a nadie sobre si se los toca, lastima o les pide que les muestren sus partes íntimas, tanto como si alguien les pide que ellos miren o toquen las partes privadas de otros. Los niños/as deben contarlo a algún adulto de su confianza y nunca guardar estas actitudes que los hacen sentir mal o confundidos como secreto. Ese “secreto” es un nudo central de la acción del abusador.
Compartimos con ustedes este video donde los Canticuenticos nos ayudan a trabajar el tema de los secretos:
Los invitamos a ver la nota realizada a la Lic. Eliana Goldring por la Televisión Pública donde relata cómo se trabaja la Educación sexual integral en el nivel inicial y la importancia de hacerlo:
Si les interesa mayor información sobre abusos sexuales infantiles, poder consultar https://www.argentina.gob.ar/abusosexualinfantil
Fuentes:
Fundación Huesped / Ministerio de Educación – Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. / TV Pública
Repositorio: https://www.argentina.gob.ar/abusosexualinfantil/estadisticas
