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Nro 71 - Junio 2016

Hipertensión Arterial - Mitos

Algunos mitos comunes sobre la Hipertensión arterial:
.”Mi presión es nerviosa”: No existe tal cosa; en momentos de estrés puede subir momentáneamente la presión y luego debe bajar a valores normales.
.”Mi presión está loca, sube y baja constantemente”: Son normales las variaciones de la presión arterial durante todo el día y de acuerdo a la actividad que estemos realizando; sube por la mañana y por la noche la curva tensional debe disminuir; es el ritmo circadiano normal; además al tomarse la presión puede existir cierta ansiedad que se refleja en un aumento momentáneo durante el registro.
. “Lo importante es tener la mínima baja”: Es falso, ambas presiones deben mantenerse dentro del rango normal y son igualmente dañinas.
. “ES peligroso si se juntan las dos presiones”: Lo importante es el valor que está alto, no si la diferencia entre sistólica y diastólica es corta.
. “En la gente mayor es normal la presión alta”: Si bien es cierto que al aumentar la edad aumenta la rigidez de las arterias y por ende la presión arterial, sigue siendo importante controlarla y mantenerla en valores normales.
. “Cuando tengo la presión alta, me duele la cabeza”: Falso; el dolor de cabeza es un síntoma inespecífico y puede deberse a múltiples causas; recordar que la hipertensión no da síntomas, o los mismos son inespecíficos.
. “Por suerte me sangró la nariz y no el cerebro”: Eso es un mito, sostenido todavía por algunos profesionales de la salud. El sangrado nasal se debe habitualmente a factores locales de las venas de la nariz; es habitual que esto dispare la presión arterial y por ende se encuentre alta al registrarla durante el episodio de sangrado. Pero en realidad el sangrado nasal es lo primero y secundariamente aparece hipertensión por el susto. No al revés.
. “No soy hipertenso porque por las pastillas que me dan la tengo normal”: Justamente por eso no se debe dejar la medicación. La hipertensión no se cura, se controla; y si se abandona el tratamiento por creer que ya está curada, se retorna rápidamente a los registros de hipertensión.

Los cambios en el estilo de vida pueden ayudar al paciente a controlar y prevenir la hipertensión, incluso si se está administrando medicación para la presión arterial. A continuación, se presentan algunas sugerencias al respecto:
. Elegir alimentos más saludables. Alimentarse con una dieta sana. Esta dieta enfatiza la ingesta de frutas, vegetales, granos enteros, aves, pescado y alimentos de bajo tenor graso. Se debe ingerir menos grasa saturada y grasa trans.
. Disminuir el consumo de sal en la dieta. Un nivel menor de sal en la dieta–1.500 miligramos (mg) por día– es el indicado para personas de 51 años o más  y para los individuos de cualquier edad pertenecientes a la raza negra, los hipertensos, los diabéticos o aquellos que padecen enfermedad renal crónica.
. Mantener un peso saludable. Mantener un peso saludable o bajar de peso en casos de sobrepeso u obesidad puede ayudar a controlar la hipertensión disminuyendo el riesgo de enfermedades relacionadas con la obesidad
. Aumentar la actividad física. La actividad física aeróbica practicada en forma regular puede ayudar a disminuir la hipertensión, manejar el estrés, reducir el riesgo de distintos trastornos de la salud y mantener el peso bajo control.
. Limitar el consumo de alcohol. Aun tratándose de individuos sanos, el alcohol puede elevar los niveles de la presión arterial.
. No fumar. El tabaco daña las paredes de los vasos sanguíneos y acelera  el endurecimiento de las arterias. Los pacientes fumadores deben recurrir a su médico para que los ayude a dejar de fumar.
. Manejo del estrés. Se debe reducir el estrés lo máximo posible.
. Controlar la presión en la casa. El monitoreo casero de la presión puede ayudar a contar con parámetros más actualizados de la presión, indicar si la medicación está funcionando e, incluso, alertar al paciente y a su médico acerca de potenciales complicaciones. El monitoreo casero de la presión no es un sustituto de la consulta con el médico; además, los tensiómetros de venta libre pueden presentar limitaciones. Aunque los valores de la presión sean correctos, no por ello debe interrumpirse o cambiar la medicación ni modificar la dieta sin consultarlo previamente con el médico.
. Controlar la presión durante el embarazo. Las mujeres hipertensas deben controlar su presión durante el embarazo.
. Administrar la medicación correctamente. En caso de que la medicación produzca efectos colaterales o que su costo resulte muy alto, no debe interrumpirse su administración sino consultar con el medico acerca de otras opciones.
. Agendar consultas periódicas con el médico. Para el tratamiento exitoso de la hipertensión es necesario concurrir más frecuentemente al inicio del tratamiento, hasta que se logre el efecto terapéutico deseado.